Se celebra la fiesta de la patrona de Villacastín, la Virgen de El Carrascal.

La fiesta tiene lugar en torno a la ermita del mismo nombre y servida por miembros de la cofradía. La hermandad o cofradía de El Carrascal, dirigida por dos capitanes y cuatro sargentos, celebran la fiesta de la Ascensión, con vecinos y foráneos de manera brillante, realizándose la misma en los terrenos de la ermita. La comitiva se dirige al templo  enarbolando dos vistosas banderas, recuerdo de ancestrales combates. Tras la misa, tiene lugar un refresco, y tradicionalmente se subastaban corderos. Por la tarde se realiza una procesión por las "eras", desde donde la Virgen divisaba el pueblo. Se realizan danzas  delante de la imagen, aupando los padres a sus hijos en las andas. Los devotos besan el relicario de la Virgen y antes de entrar nuevamente en la ermita, se procede al sorteo para "comprar el honor de entrar la imagen" nuevamente a su camarín.